La comida tiene una notable capacidad para evocar emociones positivas. Esto no sólo se debe a las reacciones fisiológicas del organismo, como la liberación de dopamina y serotonina al comer, sino también a los aspectos sociales y culturales de la alimentación. Las comidas suelen disfrutarse en compañía y pueden estrechar lazos y fomentar el bienestar emocional. Además, la comida puede ser una fuente de consuelo y apoyo emocional.
En general, la ciencia demuestra que el vínculo entre la comida y la felicidad es mucho más que una forma de hablar. Nuestros cuerpos y mentes responden a la comida de formas complejas que pueden afectar a nuestro bienestar emocional. Por lo tanto, es importante mantener una dieta sana y equilibrada que nutra no sólo nuestro cuerpo, sino también nuestra alma.
Por eso, en Purelite, nuestra misión es la indulgencia sana...